Otra vez he soñado, no es raro, ultimamente mi conciencia se transmite al sueño, estoy empezando a intentar controlarlo ser conciente de donde estoy, y manejar la historia, aun así todo torna raro.
Llevo años con este sueño, me despierto en un callejón, solo.
Abandonado y olvidado oliendo a orines y escoria ese callejón no es corriente, sus paredes son curvas abombadas como huevos sus ventanas escamas y las tuberías son venas que trasmite un fluido cromado, es extraño pero siempre se que debo hacer, me levanto.
A veces me divido en varias personas todas tienen una identidad diferente, diferente posivilidades de conseguirlo, nos giramos, nos deseamos suerte y empezamos a correr
De repente un sol bajo sujetado por una estructura nos ilumina y alinea, estamos solos.
Este sol negro como un eclipse ilumina solo por su halo, es extraño, es la primera vez que recuerdo su forma, siempre evito mirarlo.
Mientras corro no tengo ropa, cuando pienso en ello se soluciona, a veces incluso me protejo esperando lo inevitable,tomo mi anelo, todos mis esfuerzos,todas mis vidas están dedicadas a ello,
Cruzar el puente.
Mientras corro no tengo ropa, cuando pienso en ello se soluciona, a veces incluso me protejo esperando lo inevitable,tomo mi anelo, todos mis esfuerzos,todas mis vidas están dedicadas a ello,
Cruzar el puente.
Ese puente es una joya enorme, plata escamado y vertebrado con grandes estructuras defensivas custodiado por una criaturas sin ojos, caras por mano y manos por cara sujetan algún tipo de arma y fallar no suele ser lo corriente, nunca he llegado al puente.
Al final abandono, tras notar mis tripas caer sobre un suelo metálico de vegetación existente bajo la alfombra, olvidada.
Abandono al tercer tiro, y me pierdo por unas calles de negocios cerrados cuya puertas me miran con ojos extraños y cuyos animales me bufan, como si no hubiera un humano a metros en la redonda,
Al final abandono, tras notar mis tripas caer sobre un suelo metálico de vegetación existente bajo la alfombra, olvidada.
Abandono al tercer tiro, y me pierdo por unas calles de negocios cerrados cuya puertas me miran con ojos extraños y cuyos animales me bufan, como si no hubiera un humano a metros en la redonda,
tras andar termino en muchos sitios a la vez, lo mas normal es terminar en el palacio de la carne.
Es una iglesia y a la vez un burdel, a veces creo que es el edificio, a veces es la espiritualidad lo que me confunde, allí la devoción por el cuerpo enemigo, es dogmática,se enfrentan,con argumentos de fuerza violencia, no hay dialogo,no hay contacto, hay conflicto, la gente ora sobre el yaciente repitiendo sus movinientos una y otra vez, para si mismo no para el otro, alguna de las criaturas no están completas, sus cuerpos salen y entra de la pared, recorren el edificio a gran velocidad y depredan el orgasmo, en ocasiones lo fingen por algo de amor, aquí eso siempre falta.
Tras avanzar por el campo de batalla, de cuerpos existís y sangrantes, que nunca conocieron nada mas que esto y no disfrutan de nada mas que esto, llego a una de las habitaciones, allí siempre me espera.
A veces es un ángel, su alas inundan la sala y al pisar las plumas parten, su cola una cobra real muerde mis mejillas y la sangre se derrama, pierdo la consciencia entre una nube de plumas.
Otras veces se muestra humana, como yo, sus ojos son sinceros y consuela mis heridas con lágrimas, nunca lo consiguió, ella tampoco lo hizo
Por ultimo en sus peores días, es una maquina, sus partes son flexibles, sus palabras ilimitadas,sus vidas son breves, recuerdo el sol, es algo parecido, oscuro y frió pero irradia una luz magnética.
Siempre me pierdo en su cariño, cariño que no encontrare fuera, recorro su espalda acuno sus labios muero por dentro al despertar, dando me cuenta que al volver me habrá olvidado, tiene otros a los que consolar.
Es una iglesia y a la vez un burdel, a veces creo que es el edificio, a veces es la espiritualidad lo que me confunde, allí la devoción por el cuerpo enemigo, es dogmática,se enfrentan,con argumentos de fuerza violencia, no hay dialogo,no hay contacto, hay conflicto, la gente ora sobre el yaciente repitiendo sus movinientos una y otra vez, para si mismo no para el otro, alguna de las criaturas no están completas, sus cuerpos salen y entra de la pared, recorren el edificio a gran velocidad y depredan el orgasmo, en ocasiones lo fingen por algo de amor, aquí eso siempre falta.
Tras avanzar por el campo de batalla, de cuerpos existís y sangrantes, que nunca conocieron nada mas que esto y no disfrutan de nada mas que esto, llego a una de las habitaciones, allí siempre me espera.
A veces es un ángel, su alas inundan la sala y al pisar las plumas parten, su cola una cobra real muerde mis mejillas y la sangre se derrama, pierdo la consciencia entre una nube de plumas.
Otras veces se muestra humana, como yo, sus ojos son sinceros y consuela mis heridas con lágrimas, nunca lo consiguió, ella tampoco lo hizo
Por ultimo en sus peores días, es una maquina, sus partes son flexibles, sus palabras ilimitadas,sus vidas son breves, recuerdo el sol, es algo parecido, oscuro y frió pero irradia una luz magnética.
Siempre me pierdo en su cariño, cariño que no encontrare fuera, recorro su espalda acuno sus labios muero por dentro al despertar, dando me cuenta que al volver me habrá olvidado, tiene otros a los que consolar.